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UNA MONEDA SINGULAR: |
Hace unos días me informó un amigo (gracias Pepe) sobre una moneda de una casa de subastas londinense (Naville Numismatics: subasta 17, lote 91, 13-09-2015) que aparecía acompañada de otros doce lotes de monedas hispanorromanas. El hecho de figurar una marca con un león rampante en el anverso convertía a esta moneda en algo tan especial que en algún momento llegué a pensar en la posibilidad de algún tipo de manipulación, de un engaño más o menos reciente, pero el aspecto general del conjunto de dichas trece monedas más bien parecía indicar que se trataba de los restos de alguna colección antigua.
Imagen nº 1: As provincial romano de Tiberio (Colonia Augusta Emerita, Hispania Baetica, 14-37 d.C.) Evidentemente se trata de un bien conocido as provincial romano de bronce (11,28 g / 26-27 mm) acuñado en Emerita (actual Mérida, Badajoz), en tiempos del emperador Tiberio, entre los años 14-37 d.C., (ver imagen nº 12).
Este ejemplar es ciertamente común, presenta una pobre conservación, ha sido objeto de una limpieza agresiva e incluso tiene grietas, pero el león rampante incuso que aparece en su anverso lo convierte en una pieza singular. El reto es por tanto averiguar todo lo posible sobre el significado, la procedencia y la datación de esa curiosa pequeña marca del león. |
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Parece claro que el estilo de este león rampante coronado no pertenece a la amonedación romana, ni a otra cultura de la Antigüedad, (ver artículo: "Catálogo visual de contramarcas de Hispania Antigua". Es solo a partir del siglo XVI cuando podemos encontrar contramarcas con un león rampante, resellos que fueron aplicados fundamentalmente en los Países Bajos, Canarias y Nicaragua, pero pronto deseché esta línea de investigación ya que podemos observar que el león siempre aparece dentro de un pequeño cuño cuadrado, rectangular, redondo, ovalado, etcétera, nunca de la forma aislada que lo vemos en esta moneda (ver imagen nº 2). Además, lógicamente, dentro de dichos resellos el animal siempre está en relieve, mientras que en nuestra moneda aparece incuso, es decir todo él en hueco (en negativo).
Imagen nº 2: Diversos ejemplos de contramarcas con león rampante (siglos XVI - XIX) Moneda y marca son genuinas, podría atreverme a decir que de eso no me cabe duda, y también tengo claro que este supuesto resello debió de ser aplicado con la moneda ya limpia (limpiada al estilo del siglo XIX podría decirse), puesto que no se encuentra rastro alguno de óxidos o suciedad ni en el león, ni en la grieta que se produjo durante su aplicación). |
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La forma del león de esta moneda me hizo pensar en el trabajo de una ceca oficial, tal vez de finales del siglo XVIII o comienzos siglo XIX, ya que encontré diseños similares en las pequeñas monedas de 1/4 de real del Nuevo Reino y también en los cuarteles del escudo de las monedas de 8 reales de esa época. Por todo ello, la única explicación que encontré para este pequeño león incuso es que entre los siglos XVIII y XIX probaran un punzón (grabado en positivo y con el león hacia la izquierda) sobre lo primero que tenían a mano, que resultó ser una moneda del siglo I d.C. Punzón con el que después habrían de confeccionar los cuños (en negativo y con el león hacia la derecha, como se ve en la moneda de Tiberio aquí mostrada), lo que al proceder a la acuñación, daría lugar a un león rampante en positivo y hacia la izquierda, que es como aparece normalmente en las monedas de dicho periodo. Teniendo en cuenta las dimensiones del león incuso (aproximadamente 6 - 7 mm), en principio pudo haber sido utilizado tanto en monedas de 1/4 de real como en las de 8 reales, pero esta hipótesis me resultaba bastante inconcreta, por no decir imaginativa, y entendí que era necesario confirmarla encontrando alguna moneda con un león idéntico, o desmentirla oyendo opiniones más autorizadas. Por ello, pregunté en un grupo de numismática de Facebook, pero no obtuve ninguna respuesta (solo conseguí algunos likes). La cosa parecía estar difícil, cuando un par de amigos (gracias Iago, gracias M. Ángel) me proporcionaron algunas valiosas pistas. Así que me puse denodadamente a buscar "leoncitos" y... finalmente los encontré. Y encontré no uno, ni dos, sino muchos ejemplos. Durante los sucesivos reinados de Carlos III, Carlos IV y Fernando VII podemos ver abundantes monedas de 8 reales que presentan dos leones dentro de su escudo, si no idénticos, al menos muy, muy similares al león buscado. Las monedas que he visto con este tipo de león son siempre 8 reales del periodo comprendido entre los años 1772 y 1811, pertenecientes a las cecas de Madrid y sobre todo de Sevilla, pero no descarto que puedan existir algunas otras ubicaciones, en aquel tiempo Madrid centralizaba los diseños y bien pudo enviar las matrices correspondientes a otras casas de moneda, (ver el comentario de la imagen nº 16). A continuación mostraré tan solo algunos algunos ejemplos. La primera imagen corresponde a la marca de la moneda de Emerita (ver imagen nº 3), pero la he volteado para facilitar la comparación. El resto de fotos (ver imágenes 4 a 10) son monedas de 8 reales de los emisores, cecas y periodos indicados. (Haciendo clic sobre ellas se verá la moneda completa). Evidentemente este tipo de león debe de tener algo. Muchos años después, en 1943, fue precisamente el modelo elegido para una prueba de 80 reales (1 peseta) en latón, moneda que finalmente no fue adoptada.
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Dada la cercanía entre las ciudades de Mérida y Sevilla, y a la vista del elevado número de monedas que he encontrado procedentes del año 1809 de la ceca sevillana, debo de concluir pensando que muy probablemente fue en ese lugar (Sevilla) y en esa fecha (1809) cuando tuvo lugar esta curiosa prueba de punzón sobre una moneda acuñada casi 18 siglos antes. (Y con ello, doy por contestada la pregunta planteada en el título). Madrid (España), 9 de octubre de 2015 |
Veamos también otras descriptivas ilustraciones: Dibujo de Antonio Delgado (imagen nº 12), modelo de león realizado en cera sobre pizarra (imagen nº 13), ejemplos de punzones en los números 14, 15 y 16, y diversas pruebas de punzones y cuños en las imágenes 17, 18 y 19. |
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Imagen nº 12.- Dibujo de Antonio Delgado de un as de Tiberio (Emerita, 14-37 d.C.) |
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Imagen nº 13.- Modelo de león para monedas de plata
de Carlos III, realizado en cera sobre pizarra |
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Imagen nº 14.- Punzones de real de a dos de Carlos III, realizados por Tomás Francisco Prieto |
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Imagen nº 15.- Cubilete con punzones para
monedas de Carlos III |
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Imagen nº 16.- Punzón con el retrato de Fernando VII "En España, la Ordenanza de 1728 estableció la producción centralizada de las matrices monetales para que todos los punzones que se utilizasen fueran iguales. Las matrices, una para cada cara de la moneda, reproducían en bajo-relieve los motivos de la moneda, y una vez templada, se hincaba mediante prensa volante sobre un trozo de acero en estado "dulce". El resultado, una vez templado para su endurecimiento, era un punzón de hincar troqueles, con la imagen en positivo de la moneda. Si este punzón se hincaba de nuevo sobre otro trozo de acero previamente recocido se obtenía un troquel final, el cual con el grabado en negativo estaba listo para acuñar una vez templado para endurecerlo. Cuando se estropeaba un troquel, se obtenía uno nuevo por hincando del punzón de hincar troqueles sobre un trozo de acero. Así partiendo de una matriz para cada cara de la moneda, se garantizaba la igualdad de todas las monedas acuñadas independientemente de la pareja de cuños utilizada. |
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Imagen nº 17.- Prueba de punzones de real de a dos
de Carlos III (Tomás Francisco Prieto, 1770) |
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Imagen nº 18.- Contramarcas 1655 y VIII repetidas
cuatro o cinco veces, hechas |
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Imagen nº 19.- Prueba de troquel de medio real de
José I (Madrid, 1812) |